Luego de haber explorado los sinuosos caminos de la dominación social en Regreso a Reims, Didier Eribon retoma la pluma para seguir reinventando el género autobiográfico. Al escudriñar los mecanismos mediante los cuales la sociedad asigna posiciones, funciones y lugares a los individuos, emprende un ejercicio de introspección sociológica cuya meta es enfrentarse al veredicto social. Lejos de todo tipo de miserabilismo o de populismo, el filósofo y sociólogo francés se enfrenta con fuerza, honestidad y reflexividad a la implacable lógica de reproducción social que se despliega en todos los ámbitos de la vida. Eribon es capaz de transformar su historia singular en un hecho universal.